
TRAMA:
En el interior de una cabaña en ruinas, el Dios Matándose A Sí Mismo vomita sangre y posteriormente se eviscera con una navaja de barbero. Tras una larga agonía de espasmos, fallece, con su consecuente deposición postmortem.
La Madre Tierra emerge del cadáver y, haciendo uso de la natural erección del difunto, lo masturba con todo éxito y se fecunda con su esperma. Sucede la concepción.
El fruto de este auto incesto/unión necrófila es el Hijo de la Tierra - Carne y Hueso, un ser indefenso que se convulsiona incontrolablemente y que es hallado en medio del lodo por cuatro nómadas que lo atan y lo golpean sin misericordia.
La Madre interviene para rescatarlo y es brutalmente violada por la tribu, tras lo cual ella y su Hijo son descuartizados por los miembros de la tribu, mientras el ciclo de vida y muerte de la naturaleza prosigue inalterable.
La Madre Tierra emerge del cadáver y, haciendo uso de la natural erección del difunto, lo masturba con todo éxito y se fecunda con su esperma. Sucede la concepción.
El fruto de este auto incesto/unión necrófila es el Hijo de la Tierra - Carne y Hueso, un ser indefenso que se convulsiona incontrolablemente y que es hallado en medio del lodo por cuatro nómadas que lo atan y lo golpean sin misericordia.
La Madre interviene para rescatarlo y es brutalmente violada por la tribu, tras lo cual ella y su Hijo son descuartizados por los miembros de la tribu, mientras el ciclo de vida y muerte de la naturaleza prosigue inalterable.
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