jueves, 3 de junio de 2010

BIENVENIDA A CASA




-Oh hermana, querida hermana, por fin has vuelto con nosotros! -Gritó la muchacha con lagrimas en los ojos abrazando fuertemente a su hermana perdida pero por fin encontrada. La otra, más alta y con cabellera negra mucho más abundante, haciendose la fuerte, aunque muy dentro de ella se sentía emocionada, apartó a su hermana y dijó:
-Oh hermanita, es increible lo que has crecido...
De repente, un grito masculino retumbó por todo el palacio. Sin duda, era su padre, un padre terriblemente emocionado. En cuanto las alcanzó, la abrazó con tal fuerza, que era imposible soltarse.
-Mi niña! Mi princesita ha vuelto! -Gritaba con lagrimas en los ojos, restregando su cara a la de ella.
Desde ese día, para bien o para mal, no habría manera de abandonar el palacio. Tanto su hermana como su padre, no le quitaban ojo. A pesar de ser un agobio, en el fondo se alegraba de volver a palacio y estar junto a ellos. Jamás lo admitiría pero en el fondo, muy en el fondo de su joven y atormentado por el miedo corazón, deseaba estar allí y ser toda una princesa o quién sabe una gran reina.

1 comentario:

Anónimo dijo...

mary, mandame tu mail a mi correo lidia_mi_col@hotmail.com
y te invito a verlo^^
por cierto esta muy buena la ilustracion !!!!!
es lo mejor hacerlo a mano